El mundo de Santa nos lleva al cielo en la tierra con en sus espacios. Las luces frías y cálidas brindan el ambiente celestial que nos saca de la realidad. Los materiales industriales nos aterrizan al mundo terrenal donde pecar es un placer. Abrimos el espacio por medio de un arco que da la sensación de más amplitud y permite aprovechar mejor cada cm del local.