Pocas marcas tienen una historia tan corta y tan potente como La Birria del Gordo. Su esencia es una mezcla perfecta entre lo popular, lo contemporáneo y nuestras raíces. Esa combinación explosiva, picante y llena de sabor está presente en cada detalle, que se une de manera natural, estableciendo relaciones y lazos que crean la columna vertebral de la marca.
La ilustración del Gordo es una combinación entre vectores y grafiti, es una ilustración que puede escalarse en cualquier tamaño y aun así conserva la textura en las líneas. Es un retrato orgánico que al mismo tiempo es simétrico y fácil de ubicar en cualquier composición.
Nos inspiramos con todo, desde los origenes de la marca, sus referencias y procesos creativos, incluso hasta los límites de lo que no se quiere ser.
Tomamos el logotipo secundario y lo sintetizamos aún más haciendo un guiño a los avisos tradicionales de las calles.
Cuando una gran idea se une a un buen diseño, el producto no solo se destaca, sino que se convierte en una historia que cautiva y resuena con nuevas audiencias.